viernes, 5 de abril de 2013

Familia Natural



El hombre y la mujer han sido creados para complementarse mutuamente y en su unión, formar un solo ser, en alma y cuerpo. De ahí nace el concepto de vida matrimonial. El hombre, por sí solo no es capaz de ser completo, sino mediante un vínculo y una armonía con su entorno y encuentro con los demás.

En este concepto, el matrimonio no es otra cosa sino darle una plenitud a dos seres que han sido creados para sostenerse el uno del otro en el amor mas puro que lleva a unirse para dar lugar no solo a satisfaser un instinto carnal, sino a dar vida a un fruto de ese mismo amor, como lo son los hijos.

Después de complementarse el uno del otro, lo mas importante de la vida conyúgal es dar paso a la creación de los hijos cuyo fin esencial y por excelencia corresponde al matrimonio, he ahí la razón por la cual unicamente es aceptada y santificada la relación sexual dentro del Matrimonio natural entre un hombre y una mujer.

El Matrimonio es la semilla que da paso a la Familia, pilar de la sociedad en la maxima entrega y la total donación de los esposos, se "convierten en cooperadores de Dios en el Don de la Vida dando paso a una nueva persona humana" (Familiaris Consortio, Beatvs Ioannes Pavlus PP. II).



El hijo dentro del Matrimonio lo consolida, y mas aún, el amor de los conyúges es consolidado en la criatura que han formado en su amor, corresponde a los padresmla formación sana de ellos en los valores mas importantes y elementales, principalmente el amor hacia Dios, hacia ellos mismos y hacia los demás, a su ser como persona y Obra de Dios y por ende hacia lo que la naturaleza humana en la bondad original, posee por ser creación divina.

"La Familia debe ser mas comunidad de vida y de amor" (Familiaris Consortio, Beatvs Ioannes Pavlus PP. II). He ahí la razón por la cual debe ser tan defendida en la sociedad y su seno mismo, pues si no es defendida dentro de ella misma, podria decirse que es una mera organización mas del hombre. Y como dice el Venerable Pio XII: ""El Matrimonio no fue instituido ni restaurado por obra de los hombres, sino por Obra Divina... por lo tanto, sus leyes no pueden estar sujetas al arbitrio de ningún hombre" (Carta Enc. Casti Connubi, 4. Pius PP. XII).

Hoy en día, en nuestra sociedad, oímos hablar sobre la defensa de los valores, la familia y tantas otras cosas, pero por otro lado, asi como se defiende es atacada brutalmente, fruto de ello, es la aceptación entre personas del mismo sexo en el orden del matrimonio civil, cosa que por demás esta en contra de la naturaleza del hombre, pues dos personas equivalentes en su sexualidad no pueden, como se ha dicho, complementarse, y por ende, dar lugar a la formación de la vida en los hijos.

La sociedad vive un periodo de confusión, por un lado quién defiende los valores y por otro lado, quienes defienden su llamada "libertad" de elegir, pero no se da cuenta de que hace todo lo contrario a ser libre, porque se hace esclavo de sí mismo.

Atenta con el fin principal del hombre dado a él desde sus inicios: "Id y multiplicarse" otorgado a Adán y a Eva, hombre y mujer, nunca fue una consigna dada a dos hombres o a dos mujeres, pues cada fisonomia, por sí sola siendo iguales, no da el complemento del desarrollo y creación de la vida en sí misma, que por excelencia, la vida es creación divina, porque Dios es la Vida.

El ser humano, en su creación divina, es meramente perfecto, en cuanto hecho a imagen y semejanza de Dios, pero por su naturaleza de pecado, esa perfección se opaca, pero no quiere decir, que no siga llamado a ella.

Para Dios, el hombre en sí mismo es amado y aceptado, lo que no es aceptado es el pecado, con las actitudes libertinas y que atentan contra su naturaleza misma.

Amar a la Familia, significa saber estimar sus valores y posibilidades promoviendolas siempre. Amar a las Familia significa individuar sus peligros  y males que la amenzan para poder superarlas. Amar a la Familia significa esforzarse por crear un ambiente que favorezca su desarrollo. Finalmente una forma eminente de amar a la familia cristiana de hoy, con frecuencia tentada por el desanimo y angustiada por las dificultades crecientes, razones de confianza en sí misma, en las propias riquezas de naturaleza y gracia en la Misión que Dios le ha confiado. (Familiaris Consortio, Beatvs Ioannes Pavlus PP. II).



Mauricio Parra Solis



Agradecimiento al 


por su Revision a este escrito.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario